Clases ecológicas
Solo lograremos transmitir valores si logramos asumirlos como propios primero, y la ecología es uno de los conceptos que mejor se aprende con la práctica.
Se trata de que, en el día a día, los más pequeños adquieran ciertos hábitos y costumbres, y sean conscientes de la importancia que eso tiene para la conservación del planeta.
Es importante también reforzar las acciones con ciertos mensajes, que les aporten un contexto y una base para entender por qué es necesario realizar ciertas acciones. Podemos, por ejemplo, utilizar la regla de las tres R: reutilizar, reciclar, reducir.
¿Y cómo puedes aplicar esta iniciativa en tus clases? A continuación, te daremos algunas ideas de como poder hacerlo.
Ahorra agua.
Desde la misma clase ya podemos trabajar el mensaje de lo importante que es este recurso tan esencial para la vida en la Tierra. Una idea es que puedes hacer carteles para poner en cada grifo recordándolo, o revisar que no haya ninguna fuga de agua en alguna tubería.
Recicla tus materiales.
Es muy importante que los más pequeños sepan reconocer cómo utilizar cada contenedor de reciclaje, pero también como reciclar ellos mismos los residuos que generan.
Una buena idea para promover este mensaje es realizando talleres y actividades con material reciclado, reducir la cantidad de basura es un gran paso y no siempre es fácil.
Ahorrar energía.
Es importante que adquieran ciertos hábitos, como apagar las luces de las salas vacías, o desenchufar aquellos aparatos que no se utilicen.
Consumo responsable.
Aprender a comprar menos y mejor a veces es algo complicado, sobre todo por la falta de costumbre. En la escuela puedes contribuir a este cambio de mentalidad, con pequeñas pero significativas acciones.
No desperdicies el material en los talleres y manualidades, fomenta la celebración de cumpleaños sin regalos comprados (¡hazlo tú mismo!) esto se le conoce como consumo cooperativo, una genial forma de unir sostenibilidad y cooperación entre personas.
